Miles de jovenes se encuentran y solo veo de reojo aquello por lo que en algún momento fue un chaos (me pido disculpas, quizá solo era un pretexto para llorar en ese momento).
Crearse espacios para sentir que todo va a mil (y si, va a mil) corremos con la prisa del viento que acoge a una gaviota muerta para ver cuanto damos.
Los temas de las monedas plateadas empiezan a
achacar, es por aquí, es por allá, corre por aquí, mejor quédate quieta, quiero
ese puesto y así sucede luego de un trágico intento de fastidio, pero esa soy
yo ¿
Te esperaba te esperaba primavera (8) pero no
llegó nunca ese desayuno de celebración, solo hubo un estrés constante de
enviar papeles, de cerrar todo en lo que me había metido.
¿Que si valió la pena? cada segundo, y aunque no haya celebrado tu llegada con serpentina de colores, te prometo que lo haré cuando me quiera aún más.
Escrito por: Mademoiselle Parapluie.



